Hay canciones con las que nada mas oirlas sientes un algo especial que hace que la canción te guste o en caso contrario que la aborrezcas. "Love until it hurts" no solo me gusta sino que me parece de lo mejor en trance progressivo que he oido en mucho tiempo.
Algunos dirán que este tema es para bailar a altas horas de la noche pero yo opino que bien puede servir para relajarse tranquilamente en el lugar que mas te guste y a la hora que te de la gana escuchando los sonidos de Headstrong. Don Jackson es el nombre y hombre que se esconde detrás de esta formación y Stine Grove es quien pone las voces etéreas a esta composición.
Por cierto las imagenes del amateur video ayudan mucho a conseguir esa atmósfera de evasión estelar al que evoca.
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